{image}http://eldia.co/images/stories/080212/003.jpg{/image}El pasado 23 de enero tras un largo y difícil proceso fueron absueltos cuatro corteros de caña judicializados por las azucareras por participar en una protesta en el 2008.
En una audiencia, el Juzgado 3 Penal Especializado dio sentido del fallo absolutorio a favor de los procesados y validó lo que sucedió en el 2008 como una actividad en el ejercicio legítimo a los derechos de reunión, asociación y huelga.
El abogado Alberto Bejarano, quien llevaba el caso y es además asesor de la Unidad Técnica Legislativa (UTL) de Alexander López, resaltó este último aspecto, pues desde un principio la defensa asumió que lo que sucedió fue una huelga y, de esta manera, la justicia respalda el derecho a la huelga. Así mismo, resaltó la importancia de que la Procuraduría solicitara la absolución de los procesados. Este fallo “desvertebra el proceso para usar los elementos de justicia para perseguir a los trabajadores. Es un fallo en derecho pero que tiene unas implicaciones políticas muy grandes”, señaló.
En estos momentos, la defensa de los procesados se encuentra a la espera de la petición de apelación por parte de la industria azucarera, que todavía sostiene su petición de condena contra los cuatros trabajadores, y los abogados Alberto Bejarano y Juan Pablo Ochoa, quienes acompañaron el proceso.
Con sus propias palabras, Bejarano describió en resumen lo que fue el juicio: “Es el resultado de una lucha tenaz por defender a estos trabajadores. Aquí han participado sectores sociales, organismos defensores de derechos humanos, trabajadores, organizaciones sindicales en Colombia y en el mundo. Porque la solidaridad que se recibió para poder ejercer esta defensa fue activa en el plano internacional y, particularmente, de trabajadores y organizaciones sindicales norteamericanas durante más de 22 audiencias, en las cuales los acusados soportaron acusaciones de más de 40 testigos a cargo de la Fiscalía en su contra”. Cabe añadir que entre los testigos contra los acusados estuvieron dirigentes sindicales de los llamados sindicatos patronales de la industria afiliados a la CGT.