El miércoles sucedió la reunión donde se analizaron las razones desde el punto de vista pedagógico, de salud y de autonomía territorial para que en Bogotá se den avances en este tema.
“La educación se debe entender con un derecho a un mejor nivel académico, esto implica que los docentes tengan un menor número de condiscípulos por aula. Entonces, así sea en un paso inicial con recursos propios se nombren maestros en Educación Física, Educación Artística, Tecnología e Informática, segunda Lengua en preescolar y primaria y educación especial y los que se requieren en la media especializada para avanzar en el proyecto de vida de los maestros”, señaló Miguel Ángel Pardo, Fiscal de la ADE.
Cabe recordar que actualmente está abierta una convocatoria para los maestros que se quieran vincular en primera infancia. Así mismo, fue convocada para este viernes la audiencia para incorporar docentes orientadores; la administración, de forma independiente, ha planteado la posibilidad de vincular de 500 a 600 maestros en esa área.
Básicamente, la ADE soporta su propuesta en tres razones. La anterior, el derecho a una educación con mejores condiciones de infraestructura. La segunda, el derecho a la salud de los docentes, pues la sobrecarga laboral y el ambiente laboral complicado han llevado a que haya una desmejora a la salud que afecta en un 57% a los maestros y maestras del Distrito. Y tercero, la Secretaría puede exigirle al Ministerio de Educación Nacional una mejoría de parámetros en los niveles de preescolar, básica, media para defender y rodear a los maestros del Distrito en su salud.
“Después de este primer intercambio de opiniones quedó un cronograma para hacer el seguimiento de manera mensual con el fin de mirar los avances. Nosotros quedamos en hacerles llegar unos documentos sobre el tema de la salud de los maestros y nuestras propuestas”, agregó Pardo.
En resumen la salida a los problemas de hacinamiento y traslados por ‘maestros sobrantes’ tendría dos posibilidades. El plan A es enviar al Ministerio de Educaciónuna misiva en conjunto entre la ADE y la SED para pedirle mejorar los parámetros con recursos del Ministerio; y el Plan B es aplicar los parámetros con recursos propios.