La crisis humanitaria en el nororiente del país estalló recientemente, pero viene desde hace varios años a causa del abandono del Estado. “Hoy nos solidarizamos con el Catatumbo, con el campesinado. Estamos invitando a hacer una red independiente, a hacer una movilización. En la medida en que los campesinos se encuentran sin alimentos”, señaló Alberto Vanegas, director del Departamento de Derechos Humanos de la ADE.
El conflicto parece que se va a alargar, porque aunque hay una mesa de negociación, el gobierno ha demostrado una actitud intransigente, negándose a resolver las peticiones, lo que tiene estancados los diálogos; incluso con el acompañamiento de organizaciones sociales de defensa de los derechos humanos, la Iglesia y hasta la ONU.
“A pesar de que la ley ha creado las zonas de reserva campesina el gobierno nacional sigue sin cumplir este mandato, por eso los campesinos se han movilizado, exigiendo sus derechos a la tierra, al trabajo digno, a la sustitución de cultivos y el apoyo del Estado para resolver el problema de trabajo y de pobreza que hay en la región.Reclamamos el diálogo inmediato”, añadió Vanegas.
De igual forma, la CUT exigió investigación y rechazó el uso excesivo de la fuerza por parte del Ejército, situación reconocida por las Naciones Unidas, cuando disparó contra campesinos inermes y asesinaron a cuatro personas en medio de la movilización.