Bogotá, 12 de diciembre de 2019
¡Colombia despertó! Nuestro país ha sido sacudido por una gigantesca movilización social que inició con el Gran Paro Nacional del 21 de noviembre y los que a hoy, son 22 días de diferentes formas de movilización masiva, creativa y contundente. Todo esto, en el marco de protestas en toda América Latina en rechazo del neoliberalismo y las imposiciones imperialistas de la OCDE y el FMI.
Nuestra Central Unitaria de Trabajadores en la Junta Nacional del 3 de octubre propuso una Jornada Nacional de Paro que fue ratificada por consenso en el Encuentro Nacional de Emergencia de Organizaciones Sociales y Sindicales. Con mucha decisión, salimos a hacer propaganda y organizar el #21N, buscar nuevos sectores e impulsar nuestras reivindicaciones dentro de la población en general.
En el Encuentro Nacional de marzo y el III Congreso Nacional de Juventud de la CUT de mayo en declaraciones políticas habíamos denunciado que la profundización del neoliberalismo implicaba un recorte de derechos de las mayorías y un especial ataque a la estabilidad y los derechos de la juventud colombiana. Denunciamos la precaria situación laboral que están viviendo los jóvenes y por tanto la negación de su derecho a la asociación y la negociación, además de la nefasta propuesta de la contratación por horas que extinguiría definitivamente la estabilidad laboral. Todas estas denuncias se materializaron en el paquetazo de Duque e inclusive en propuestas de los gremios como que a los jóvenes solo nos pagaran el 75% de un ya precario salario mínimo.
El Paro Nacional del 21 de noviembre que fue convocado por el Comité Nacional de Paro, sellado con un espléndido cacerolazo que retumbó en todos los rincones del país, se convirtió en el mayor estallido de la historia reciente de Colombia. Lo jóvenes, en sus distintas expresiones: sindicalistas, estudiantes, ambientalistas, barristas, secundaristas, de grupos étnicos, artistas, de comunidades LGBTI y aquellos que por el modelo económico ni estudian ni trabajan, fuimos protagonistas indiscutibles de esta gran movilización social.
Como jóvenes, desde nuestras distintas organizaciones y expresiones, hemos contribuido a ampliar y fortalecer el Comité Nacional de Paro como el espacio de interlocución ante el gobierno de Duque, que interpreta las reclamaciones del pueblo colombiano expresadas en la agenda que recoge las líneas temáticas de los principales problemas que el gobierno debe resolver favorablemente a Colombia y a sus gentes
A pesar de la fuerte represión estatal que han vivido la masiva protesta social, que incluye la lamentable muerte del secundarista Dilan Cruz, el constante amedrantamiento y la política de terror encabezada por el ESMAD e incluso de subir a jóvenes a vehículos particulares, irrumpiendo toda legalidad. Ante eso, los jóvenes continuamos activos en las jornadas de movilización y el faro de nuestra lucha no ha podido ser opacado y nuestra alegría y creatividad siguen y seguirán siendo parte del momento histórico de nuestro país. A la par de esta política de represión, el gobierno nacional ha decidido ignorar los reclamos ciudadanos y negándose a sentarse con el Comité Nacional de Paro para negociar los 13 ejes que hacen parte del pliego presentado por quienes convocamos y sostenemos el Paro Nacional.
Hacemos un llamado a la juventud colombiana y a la ciudadanía en general a no doblegarse ante la dilación del gobierno y continuar en las diferentes dinámicas de movilización y pedagogía. El Encuentro Nacional sindical, social, étnico y popular convocó a una gran toma de Bogotá contra la aprobación de la nefasta reforma tributaria, el desarrollo de Encuentros y Asambleas Populares en las regiones del 15 al 29 de enero preparatorias de un Gran Encuentro Nacional con los Comités de Paro constituidos y con todas las organizaciones sindicales, sociales, populares, juveniles, de mujeres, pueblos indígenas, pueblo negro, campesinas, entre otros. Debemos como jóvenes, continuar aportando con creatividad y alegría a la construcción de las más amplia y unitaria movilización en contra de Duque, la OCDE y en defensa de la paz y la vida.
¡Unidad para avanzar, viva el Paro Nacional!