{image}http://imagen.eldia.co/cache/cut/movilizacion010510/dscf8333_595.jpg{/image}El Día Internacional del Trabajo fue masivo y contundente en todo el país. La tranquilidad reinó en la mayoría de las ciudades, aunque algunos actores que representaban un mínimo porcentaje de los asistentes se dieron a protagonizar disturbios.
Las direcciones de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), de la Confederación de Trabajadores de Colombia (CTC) y de la Confederación General de Trabajadores (CGT) se cumplieron en detalle. En Bogotá, inició desde la carrera 7º con calle 20 el emblemático recorrido que terminó en la Plaza de Bolívar. Arengas y manifestaciones llenaron la plaza más representativa de Colombia.
Más que grabar la manifestación, los medios de comunicación nacionales se limitaron a esperar el momento de los desmanes, para generar de ahí las noticias con las que llenaron las páginas y los minutos en televisión. El Secretario de Gobierno de Bogotá, Jorge Rojas, llamó la atención sobre la actuación de la fuerza pública. Efectivamente, al final de la marcha, la policía lanzó gases lacrimógenos y presionó a los manifestantes, situación que generó los enfrentamientos y que vivió en otras ciudades. Se destacaron las movilizaciones en Cali, Cúcuta y Medellín.
El cumplimiento cabal de esta tarea prepara la acción nacional de protesta para el próximo 24 de mayo. Este día ha sido escogido por las centrales obreras para manifestarle al Congreso que la agenda legislativa, que está aprobando a ciegas, va en contra de los derechos de los trabajadores; al Gobierno, que están dispuestos a no dejar pisotear sus derechos sin dar la correspondiente pelea; y al mundo que Colombia se dirige en una política de destrucción de la producción industrial y agraria que está generando flexibilización, informalidad y miseria.