El primer caso fue el de la rectora Marta Cecilia Quintero en el 2011. Desde entonces, las amenazas han sido paulatinas. Se repitieron a mediados del 2012, cuando fueron en contra de la coordinadora y de algunos docentes. Y este año volvieron a suceder, al punto de que las intimidaciones llegan hasta los estudiantes.
Lo que avivó la alarma y la indignación de la comunidad educativa fue una llamada al celular donde amenazaron a la docente Diana Marcela Gonzálezy a su familia, el lunes anterior. Allí empieza la movilización. Un grupo de docentes sostuvo una reunión con la Secretaría de Educación, allí consiguieron acuerdos y el 20 de junio se volverán a encontrar para hacer el seguimiento de estos.
Pero en general, la respuesta de la Secretaría es desalentadora, pues ellos dicen que hay muchas cosas que se escapan a su control. “Pero no hay un protocolo de seguimiento a los estudiantes amenazados o solo una medida cautelar, que consiste en que si el docente es amenazado se traslada de institución, pero quienes nos quedamos permanecemos en el miedo y la angustia. Quedamos solos”, indica la docente Yuly Bahamón.
La comunidad docente ha instalado las respectivas demandas ante la Fiscalía; pero tras averiguaciones han confirmado que ni siquiera se han designado a los fiscales para investigar. “Eso implica impunidad total. Cualquier estudiante o cualquier persona que no esté de acuerdo con nuestra labor en la institución, simplemente, envía una amenaza y como no se investiga. Lo que nosotros hemos pedido es que las instituciones del Estado, encargadas de proteger nuestros derechos fundamentales, como el derecho a la vida, al trabajo y a la educación de nuestros niños, nos protejan; que no nos dejen solos y que se den cuenta de que somos trabajadores que estamos aportando a la sociedad. Necesitamos que la sociedad colombiana no guarde silencio, que apoye la causa de los docentes, los docentes somos la profesión que genera a otras profesiones”, agrega la profesora Bahamón.
Este miércoles llegaron a la ADE solicitandoasesoría legal y los espacios para la acción. Para el jueves han programado en el colegio actividades de tipo pedagógico con la comunidad en fomento de los derechos humanos en términos de labor pedagógica. Básicamente, los docentes de Compartir El Recuerdose están moviendo en dos ámbitos, el pedagógico sobre cómo trasformar estas situaciones en experiencias de vida; y, al mismo tiempo, en la parte administrativa y de gestión ante las entidades del Estado.