“No tiene con qué prestarle servicios a los usuarios, no hay hospitales, ni IPS, ni medicamentos. Se está jugando con la vida de los usuarios del régimen subsidiado”, señaló Esperanza Reyes, Presidenta de Sintracaprecom. La politiquería ha carcomido esta entidad de salud desde adentro; lleva años quedándose con los dineros, pero desde hace un año se ha hecho más evidente. “Estamos inundados de politiquería”, dice Esperanza Reyes, agregando que al interior hay una “guerra de poderes” en la que varios senadores están detrás de la repartición de los recursos, “parece una torta de fiesta”.
En efecto, hace poco nombraron a Juan Carlos Botero, como gerente, y renunció al cargo días después porque sencillamente no lo dejaron conformar su grupo directivo, pues todos pretendían que se nombraran cuotas políticas a su parecer.
La Presidenta de Sintracaprecom resume las peticiones del sindicato en tres aspectos: “que se nombre un director con autoridad y autonomía para designar su grupo directivo, que saque la corrupción y que venga a trabajar por el objeto de Caprecom que es la salud; que se elimine la tercerización de la cooperativa ‘Cooperamos’ que monopoliza la contratación y explota a los trabajadores; y que se mejore la red de servicios en favor de los usuarios”.
Ellos han solicitado una cita con el Presidente y la Ministra para que proyecten soluciones inmediatas y no a 6 meses, como se ha planteado, “los enfermos necesitan los medicamentos y la atención ya”. Por lo pronto, Sintracaprecom está conversando para definir la hora cero, ya ha solicitado el apoyo de Fenaltrase, la CUT, al CGT y la OIT. “Si el gobierno de Colombia no le interesa, están las orientaciones porque estamos pidiendo un derecho vital que es la salud. Alguien tiene que prestarle atención a Caprecom”, finalizó Reyes.