Ese es el mensaje de la Unión Sindical Obrera a las comunidades de Puerto Gaitán (Meta) y sus municipios vecinos, donde operan las multinacionales Pacific Rubiales Energy (PRE) – Meta Petroleum Corp. y Cepcolsa. Estas empresas, con el aval del Gobierno, convirtieron el territorio nacional en propiedad privada, privatizaron las vías e impidieron el acceso a las comunidades, crearon nuevas reglas en la relación contractual con sus trabajadores, impusieron jornadas laborales de hasta 18 horas, dieron tratos indignos a los trabajadores, quienes realizan sus labores en situación permanente de peligro, entre otras múltiples violaciones que incluso afectaban a las poblaciones.
La impunidad y silencio se rompieron el año pasado, luego de 12 años, tras un cese de actividades laborales y la interrupción de la producción diaria de 250 mil barriles de crudo en una acción conjunta de la comunidad y de la USO. Como resultado, el gobierno nacional y las multinacionales crearon escenarios de negociación que propiciaron algunos avances reivindicatorios de derechos laborales. Sólo que después despidieron sin justa causa, a más de 5.000 trabajadores afiliados a la USO e incumplieron todos los acuerdos.
Hoy, la USO le recuerda a la población de Puerto Gaitán que sigue con ellos, que la lucha no ha cesado. Extiende la invitación a todo el departamento del Meta, a levantarse para exigir sus derechos, a luchar hombro a hombro por nuevas conquistas y reivindicaciones, por la soberanía nacional y por la dignidad popular.