{image}http://eldia.co/images/stories/211211/002.jpg{/image}En hechos confusos, ocurridos el pasado 18 de diciembre en Toribio (Cauca), falleció la joven indígena Franci Milena Rivera Secue. De acuerdo con testigos, dos impactos de bala, al parecer perdidas, provenientes de armas militares terminaron con la vida de la joven.
Marcela Cabrera, de la fundación CIMA, explicó que hacia las 2:00 p.m. en la vereda San Julián (Toribio, Cauca) de ese día domingo, se desarrollaban enfrentamientos entre integrantes del Ejército Nacional y de las Farc en inmediaciones del batallón recién instalado en la vereda. Los combates se extendieron hasta cerca de las 5:00 p.m. Franci Milena se encontraba en una residencia del casco urbano de la vereda. Hacia las 2:30 p.m. salió al patio de la casa y allí fue impactada por dos proyectiles de fusil. Murió de forma instantánea.
Pese a que la zona poblada de la vereda San Julián se encuentra alejada del área de los enfrentamientos armados, un grupo de militares varias veces dispararon ráfagas de fusil con dirección hacia el área poblada.
Marcela Cabrera insistió en que la población civil suele ser la más afectada en estas confrontaciones armadas. Recordó el caso de Caldono (Cauca) donde un cilindro bomba de las Farc que tenía otro destino, acabó por destruir una vivienda. “Hacemos un llamado a las autoridades civiles y militares, y a las guerrillas en Colombia a que respeten el Derecho Internacional Humanitario y dejen por fuera a las comunidades civiles, indígenas, afros y campesinos, más aun a las que residen en los epicentros de violencia.”, afirmó Cabrera.
La joven Franci Milena tenía 19 años, recién se había graduado de bachiller y era integrante de la asociación indígena “Avelino Ul” y de la Coordinación Departamental del Cauca del Proceso de Unidad Popular del Sur Occidente Colombiano.
