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El equipo económico del Gobierno de Juan Manuel Santos continúa desarrollando políticas neoliberales, aumentando las gabelas al capital inversionista transnacional, es el caso de la venta del 20% de las acciones de la otrora estatal petrolera, hoy Empresa Colombiana de Petróleos S.A.
Se engaña al país hablando del 10% de capitalización, es decir, que están emitiendo acciones y no vendiendo parte de la empresa y que el otro 10% para infraestructura vial, sí es privatización y requiere aprobación del Senado.
La industria petrolera es una de las más rentables del mundo, dos de las tres empresas de mayores utilidades y valor en el mundo (EXXON y PETROBRAS) son petroleras, pero la determinación del Gobierno Nacional es seguir minimizando las inversiones estatales y continuar entregando esta riqueza natural a los monopolios transnacionales.
Ecopetrol nace en el año de 1951 como empresa del Estado, después de la huelga patriótica de la Unión Sindical Obrera en el año de 1948, encargada de administrar los hidrocarburos y sostener el autoabastecimiento de combustibles al país. Después de 60 años ese esfuerzo y patrimonio de los colombianos se feria con el pretexto de invertir en infraestructura de transporte para facilitar la salida de las materias primas y el ingreso de productos y mercancías extranjeras.
Desde los inicios de la privatización de las empresas del Estado, la lucha ha sido parte de los trabajadores y trabajadoras y el pueblo colombiano que conoce la importancia del patrimonio público y la inversión de sus utilidades en el desarrollo social integral y la industrialización del país.
En Colombia la rentabilidad de Ecopetrol ha estado ligada a la renta del petróleo y el gas, y a la maniobra oficial de cobrarles a los consumidores los combustibles al precio internacional, en lugar de los costos de producción y refinación locales, siendo que somos autosuficientes.
Los combustibles son los más costosos comparados en Latinoamérica, después de Brasil, esto ha conllevado al incremento desmesurado de la canasta familiar por las alzas permanentes en el transporte. Si tenemos en cuenta el 13% y el 19% de incremento de los combustibles (Gasolina y ACPM, respectivamente), la oferta del salario mínimo del 2.5% es irrisoria.
La Central Unitaria de Trabajadores – CUT rechaza la política de favorecimiento hacía los monopolios transnacionales y exhorta al Gobierno Nacional a no vender, ni emitir más acciones de Ecopetrol, recobrar el control estatal de los hidrocarburos y que sus utilidades no vayan al bolsillo de unos pocos en detrimento del nivel de vida de muchos millones de habitantes en nuestro país.
TARSICIO MORA GODOY DOMINGO TOVAR ARRIETA
Presidente Secretario General
JORGE E. GAMBOA CABALLERO
Directo