Una de las preguntas claves que respondió se relaciona con la cobertura en educación, específicamente sobre las dificultades que enfrenta la ciudadanía para acceder a los cupos escolares. El personero Ricardo Cañón habló sobre este aspecto: “Como la personería hace presencia para hacer valer el derecho a la educación por parte de la administración del distrito y el estado. Siempre hablamos acá de deberes y derechos. El tema de educación es un tema donde, inicialmente, con la precariedad de recursos que tenía la ciudad se concentró mucho en ampliar cobertura, y no en cómo ampliar cobertura y de una vez mirar la calidad. La educación es el alimento del espíritu; esa es la carne, la papa, la yuca de la mente. Nosotros no podemos darle a la gente simplemente cosas que le generan sensación de llenura”.
Pero también se refirió al tema coyuntural del matoneo: “Es doloroso el tema del matoneo en los colegios públicos. De manera errática se han convertido en lugares inadecuados para el encuentro de espíritus. Es hay personas, niños, jóvenes que se están empezando a formar y arrancan en una situación donde esos espíritus están un poco distorsionados. La pregunta es ¿existe una política pública para el tema de la convivencia estudiantil? No. Sería importante por programas puntuales en los sitios catalogados como problemáticos, no solo cumplir formalmente con el tema. El tema de convivencia y formación de espíritu le corresponde al que enseña Física y Matemáticas, al que enseña deportes, nos hemos vuelto ajenos, al compromiso de una nueva y mejor sociedad.
Cañón redondeó su idea con relación a cobertura: “El reto de lo imposible es una educación de calidad, con cobertura pero de calidad. Tenemos que enfrentar y adecuar una oferta al niño, al joven. La sociedad y el Estado deben de darle ofertas para pueda el elegir y saber qué va hacer con su vida”. Después del álgido debate que ha girado en torno a la Personería de Bogotá es fundamental conocer cómo piensa el nuevo encargado de esta entidad que vigilará la política pública y la política educativa de la capital colombiana.