Otra de las razones para la generación de esta acción de indignación de los trabajadores petroleros está relacionada con la falta de garantías para la libre asociación sindical que en los últimos meses se ha visto golpeada, pues los amedrentamientos de Ecopetrol y Occidental Andina en el Campo petrolero Centro ha sido una constante. A esta persecución se suman las amenazas a cerca de cinco representantes de la subdirectiva centro, lo que evidencia el intento de ejecutar un plan sistemático para acabar con la USO en esta región del país.
“En este cese de actividades de 24 horas únicamente pedimos respeto a la vida y respeto al derecho fundamental de la libre asociación, es triste que en un país se tenga que paralizar aun en pleno siglo XXI la producción para decirle al gobierno que los trabajadores también somos personas y merecemos dignidad” explicó Luis Tabares, directivo de la USO Subdirectiva Centro.
Actualmente en la región se llevan a cabo procesos de exigencia y reivindicaciones obreras con tres empresas contratistas, con el fin de exigir que se tenga en cuenta la hora de almuerzo como hora laboral, además que se garanticen las condiciones locativas óptimas para que los trabajadores puedan consumir sus alimentos pues actualmente almuerzan en el sitio de trabajo y en los pastizales cercanos pues no existe un casino donde almorzar. Por último, se está avanzando en una campaña de exigencia a las empresas para que reconozcan al sindicato como el representante legítimo de los trabajadores.