La CUT y Sintrainagro rechazan la política de Santos de importar estos productos
Bogotá, 14 de agosto de 2017.
El etanol importado de Estados Unidos ya se mezcla en Bogotá afectando la estructura de la producción nacional que inició en octubre del 2005, el gobierno acaba de aprobar la importación del biodiesel que inició su producción en el país a partir del 1 de enero del 2008, además en los últimos 3 meses se han importado 24 millones de litros.
Es el golpe más grave que sufre esta nueva industria colombiana que en lo que va corrido del 2005 invirtió más de 5.000 millones de dólares en tierras, infraestructura agrícola, plantas, investigación, etc, con alrededor de 32.000 nuevos empleos que están en serio riesgo por la irresponsabilidad del gobierno.
El beneficio ambiental, argumento con el que fue próvido el uso del etanol, se torna secundario teniendo en cuenta que mientras la mezcla con alcohol obtenido a partir de caña reduce hasta el 74% de las emisiones, el de maíz lo hace máximo en 43%, pero lo peor no es el impacto ambiental, sino los riesgos laborales y sociales que se generan al introducir al mercado interno grandes cantidades de etanol importado altamente subsidiado en Estados Unidos y Colombia, lo que implica un tributo directo de los consumidores nacionales a las arcas de la multinacionales norteamericanas. Mientras el etanol nacional vale $8559 el importado es a $5400 por los enormes subsidios (US 50 billones).
La agroindustria azucarera se encuentra en una encerrona por parte del gobierno teniendo que producir cierta cantidad sin posibilidades de crecer por la importación masiva de etanol de los EE.UU. para cumplir con los compromisos del Tratado de Libre Comercio (TLC), lo que ocasionaría que en cualquier momento la importación se desborde y el cierre de las refinerías de etanol y biodiesel se convierta en un hecho como lo vienen denunciando la CUT y SINTRAINAGRO, desde hace tiempo. En el momento se encuentra copada la capacidad de almacenamiento de las destilerías colombianas y en poco tiempo tendrán que obligatoriamente parar la producción con las consecuencias sociales conocidas.
“Es tan irresponsable el gobierno Santos que gastó más de 750 millones de dólares de nuestro presupuesto para montar la planta de Bioenergy en el Meta para producir etanol y apenas la inaugura aprueba la libre importación de etanol. No hay calificativo a tan absurdo comportamiento. Hacemos responsable al gobierno nacional de las consecuencias que puedan tener estas medidas que van en detrimento del patrimonio público al matar un proyecto que pretende garantizar la seguridad energética en el país”, aseguró Luis Alejandro Pedraza, presidente de la CUT.
No queda más que exigir la renegociación del TLC para echar atrás todas estas medidas que no han hecho cosa diferente a quebrar la producción nacional en beneficio de los extranjeros y en particular de las multinacionales.
“Es la hora de una gran unidad de todos los actores de la cadena del azúcar, el etanol y el biodiesel en la defensa de nuestra producción, la soberanía y el trabajo de los colombianos. Hacemos un llamado a todos los sectores sociales, políticos, empresariales, académicos y a la población en general a que defendamos el proyecto bioenergy como un patrimonio de los colombianos y la producción nacional de etanol. El gobierno Santos sigue en su empeño de favorecer a las multinacionales en contra del interés nacional; unámonos para impedir este desastre”, afirmó Guillermo Rivera, presidente de Sintrainagro.
LUIS ALEJANDRO PEDRAZA GUILLERMO RIVERA
Presidente CUT Presidente SINTRAINAGRO