Sintracarbón lamenta que la vida de los operarios del ferrocarril esté en permanente riesgo por los atentados que se suceden en la Línea Férrea, a pesar de la presencia de una base militar que tiene como principal objetivo la protección de las instalaciones de Carbones del Cerrejón. La protección de la vida y la integridad de nuestros compañeros es responsabilidad de la Mina y de las autoridades designadas para ello.
Esta organización que representa a 12.000 familias de trabajadores directos y tercerizados de Carbones del Cerrejón se manifiesta inquieta por la falta de acción de las autoridades para investigar estos hechos, aclarar las responsabilidades en su ocurrencia y judicializar a los culpables.
A nuestros compañeros que trabajan bajo el miedo de lo que encuentren en su recorrido entre la Mina y el Puerto, nuestra solidaridad plena y la garantía de que vamos a seguir trabajando porque se les ofrezcan justas garantías de seguridad.
Nuestra organización deplora que algunos grupos insistan en el ataque a ciudadanos indefensos como método de presión. Cuando se hacen ataques contra la mina Cerrejón, el tren o sus instalaciones, la mayor afectación puede ser de los trabajadores que están expuestos a estas acciones.
JUNTA DIRECTIVA NACIONAL
Riohacha, 25 de junio de 2013