Tras el hundimiento de la reforma a la salud en el Senado de la República, la CUT insistirá en la conveniencia y necesidad de una reforma en este sector que defienda realmente los recursos públicos para que estos sean entregados efectivamente a la atención en salud y no a la intermediación financiera como sucede con el actual sistema.
Así mismo, la Central persistirá en la necesidad de acabar con la intermediación laboral para dignificar a los trabajadores de la salud, tal como lo planteaba el proyecto de ley del gobierno del cambio, estos no aceptarán continuar en la precariedad y bajo las pésimas condiciones de sobreexplotación que tiene repercusiones, incluso en la salud mental de las personas. El modelo del sistema de salud que hoy existe en Colombia es el del paseo de la muerte, flagelo al que han sometido a la nación y que continuará con la decisión del Congreso de la República de hundir, esta reforma propuesta por el gobierno.
En Colombia se ha sostenido de forma reiterada que debe hacerse una reforma a la salud, sin embargo, se oponen a darle un vuelco verdaderamente e incluso discutir cualquier proceso de concertación que ponga fin a la pérdida de recursos de la salud: casi 13 billones en el año 2023, que se suma a los 25 billones que ya se habían anunciado y a los 12,7 billones de reservas técnicas que no han apropiado las Entidades Promotoras de Salud. El modelo de las EPS es perverso y está hecho única y exclusivamente para que los sectores privados, atesoren riquezas con los fondos públicos, desconociendo el derecho fundamental de la salud.
¡Vamos todos el 9 de abril a la movilización social!
Bogotá, 4 de abril de 2024.
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