La marcha fue convocada por los funcionarios españoles a través de las redes sociales, en especial a través del Twitter «#graciasfuncionarios».
Durante la protesta, los manifestantes gritaban «manos arriba, esto es un atraco» en alusión a las medidas de ajuste y el sacrificio que estas imponen.
Miguel Contreras, un enfermero de 28 años de edad proveniente de la región de Castilla la Mancha (centro) manifestó que «es intolerable. Los problemas del Estado español no provienen de los trabajadores públicos, no tenemos la culpa. No es lógico, es injusto y vergonzoso».
«Estas medidas van a arruinar a España. No estamos consumiendo, ya no compramos. Tenemos que salir a la calle, no podemos quedarnos sentados», expresó por su parte Angeles Carrasco, una funcionaria de 57 años de edad, que trabaja en la Alcaldía de Madrid.
Los empleados públicos también fueron llamados a manifestarse durante su pausa de café fuera de los edificios, hasta el próximo miércoles.
Previo a esta manifestación espontánea, varios de miles de personas, muchas de ellas funcionarios, también salieron a las calles de Madrid en la noche de este domingo para rechazar las medidas de Rajoy.
Entre pitos y coreando lemas como «¡juntos podemos!» o «¡el próximo parado que sea un diputado!», los manifestantes recorrieron el centro capitalino desde la sede central del gobernante Partido Popular (PP) hasta la emblemática Puerta del Sol para dirigirse después al Congreso de los Diputados.
«Nos recortan a los de abajo, pero los concejales y los asesores que tienen no los recortan», afirmó Jesús de 35 años de edad, tras señalar que «con el sueldo de un asesor se pagan 4 policías».
Las protestas espontáneas se dan luego de que el Gobierno español aprobara el pasado viernes, entre otras medidas, la supresión de la paga de Navidad para los funcionarios, la subida del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y la rebaja de la prestación por desempleo para recortar 65 mil millones de euros (79 mil 599 millones de dólares) hasta el 2014.
Para el próximo jueves se espera que los dos principales sindicatos de la nación europea, Unión General de Trabajadores de España (UGT) y la Confederación Sindical de Comisiones (CCOO) también se manifiesten en contra de las medidas económicas.
