El primero ocurrió en 1984, en plena instauración de la mesa de negociación entre las guerrillas y el gobierno de Belisario Betancur, ese año los estudiantes salieron a protestar por el asesinato de varios de los lideres mas prominentes de las universidades, ocho días antes de aquel trágico suceso en el Valle del Cauca los paramilitares habían asesinado a Jesús León, representante estudiantil. El 16 de mayo se pacto como un día de resistencia a la ola de asesinatos y desapariciones a los estudiantes pero termino siendo la arremetida de la policía (GOES) quienes ingresaron disparando al interior de la Universidad Nacional que dejo un número indeterminado de estudiantes desaparecidos y asesinados, el cierre por un año del claustro universitario y la clausura definitiva de las residencias estudiantiles.
El otro hecho que enluta esta fecha sucedió en Barrancabermeja, Santander en 1998 cuando un grupo de paramilitares se tomaron la comuna siete de dicha ciudad, organizados por Julian Bolívar en esta oportunidad fueron asesinadas 7 personas en la cancha del barrio y se llevaron en camiones a 25 personas mas, de las cuales aun no se conoce su paradero. Este hecho marco un rompimiento en las relaciones de hermandad que se daban en la región y el miedo se apodero de todos los santandereanos pues recientes investigaciones han logrado comprobar que la fuerza publica ha estuvo involucrada en el hecho delictivo. Según la declaración dada por otro jefe paramilitar esta masacre fue un error ya que la decisión fue tomada mientras la cúpula de las AUC se encontraban ingiriendo alcohol durante una fiesta.
A pesar de estos dos hechos que aun marcan la vida de cientos de personas en Colombia y que ven en el 16 de mayo la fecha en la cual su vida se partió en dos, también las organizaciones sociales y estudiantiles han aprovechado esta fecha para no permitir que el olvido se convierta en la constante de los delitos cometidos por el estado y su mano oscura. Por el contrario hoy se siguen levantando las banderas de organización de los familiares y victimas insistiendo y persistiendo en el ejercicio histórico que exija verdad, justicia y reparación integral.
A pesar de que estos actos intenten asesinar la esperanza, esta siempre vuelve a nacer, actualmente la fecha es conmemorada en las principales universidades del país con foros, movilizaciones y escenarios de discusión entorno a la memoria, “en Barrancabermeja por su parte gracias a la presión de las organizaciones sociales se logró institucionalizar el 16 de mayo como el día municipal de las victimas” explicó Ludwing Gómez, vicepresidente de la USO Barrancabermeja.
